Crear una compañía

Kusflo, un lector, me envía un mail pidiéndome consejo sobre los pasos a dar para constituir una empresa. Junto con otras personas tiene varias actividades en internet y quiere profesionalizarlo todo un poco. Estaba contestándole por mail, pero antes de acabar he decidido hacer caso a lo que él mismo me proponía y escribir un post al respecto.

Para empezar, aclaremos que estamos hablando de cómo dar el paso a constituir una empresa, no de dar el paso a emprender, que aunque son cosas relacionadas, no son exactamente lo mismo. En este supuesto la actividad existe y se trata de formalizarla. Aspectos a tener en cuenta:

  1. Tipo de sociedad. Normalmente considerarás una Sociedad Limitada, una SL. Es la tipología más habitual, tiene menores requisitos de capital (3.006 euros) que la Sociedad Anónima, las obligaciones formales son más sencillas y tiene mayores limitaciones a la transmisión de acciones fuera del grupo de socios iniciales.
  2. Composición accionarial: cuantas acciones tiene cada uno, como se establece ese reparto. Es muy importante valorar bien cuál ha sido y será en el futuro la aportación de cada socio (ojo, que lo que pasó anteriormente no tiene por qué seguir siendo igual en el futuro).
  3. Pacto de accionistas. Basicamente regula las reglas de juego y establece a priori las condiciones de divorcio. Carlos Blanco escribió no hace mucho un post muy completo al respecto. Un detalle más, conviene asesorarse bien por abogados a la hora de redactarlo (salvo que ya tengas mucha experiencia). Hay claúsulas que sólo son válidas si van en los estatutos de la sociedad; ponerlas en el pacto de accionistas no vale para nada.
  4. Constituir la sociedad os va a suponer un desembolso mínimo de 3006 euros. No es que os lo gastéis, será el capital inicial de la sociedad y no se puede sacar de caja (o quiebras) de la compañía.
  5. Gastos de constitución: suelen ser varios miles de euros (notarios, registros y demás). eConta/BBVA ahora tienen un plan de emprendedores que te paga esos gastos si abres cuenta con ellos y contratas su servicio de gestoría durante un año.
  6. Tendrás que llevar contabilidad oficial y eso, o lo controlas tú mucho, o te fuerza a contratar a una gestoría (de nuevo nosotros usamos y recomendamos los servicios de eConta; aparte de ser relativamente económico, lo puedes hacer todo online).

Además, recomiendo que antes de montar nada te hagas con un ejemplar de El libro negro del emprendedor, de Fernando Trias de Bes, que es muy ilustrativo y muy fácil de leer. Si yo lo hubiera leído a tiempo (de hecho antes de que se publicase) me habría ahorrado unos cuantos errores de principiante.

En Pymes y autónomos podéis encontrar mucha información sobre este tema. Y, por supuesto, encantado de que comentéis otros aspectos importantes que se me hayan podido pasar para completar este post.

Ladrones del tiempo

Reloj

Seguro que lo que voy a contar os suena a muchos. Especialmente a los emprendedores, pero seguro que también a muchos otros. Si te paras un poco a pensar te das cuenta de que nuestro bien más valioso es nuestro tiempo. Tiempo para hacer cosas, para hacer crecer la empresa, para vender, para pensar y lanzar nuevos productos, para montar y reforzar el equipo, para controlar como van las cosas, para planificar, para…

Y sin embargo, nos encontramos constantemente (al menos yo) dedicándole tiempo a cosas que, en el mejor de los casos, son secundarias. Con más frecuencia de la que debiera acabo el día sin tener una idea muy clara de qué cosas productivas he hecho hoy. Así que, últimamente, estoy haciendo un esfuerzo bastante constante por reducir al mínimo dichas pérdidas de tiempo útil.

1. Correo:
Es un sumidero de tiempo impresionante. Aunque tenga la pestaña del correo (gmail for domains) siempre abierta, suelo mirarla al principio del día y luego algunas veces más durante el día cuando he terminado una tarea y antes de empezar con la siguiente. Desde luego muy a evitar los notificadores que te avisan cada vez que tienes un correo recibido. Si la gente tiene que localizarte urgentemente, que te llame al móvil o que te contacte vía messenger, pero no les dejes pensar que estás siempre delante del correo (mucho más a evitar aún con las blackberries).

Además, intento gestionar el correo para dejar siempre el inbox a 0. La verdad es que no lo consigo, pero tenerlo en 20 correos (todos leídos) ya me parece un triunfo comparado con la situación anterior. Sigo unos cuantos trucos. En primer lugar intento automatizar todo lo automatizable con los filtros de Gmail. Por una parte para mandar a la papelera todo lo que huele a spam o a publicidad no deseada. Tengo en ese filtro los dominios de unas cuantas agencias de comunicación, por ejemplo. Por otra parte mando a carpetas lo que no necesita mi atención pero quiero guardar. Por ejemplo algunas newsletters (creo que quedan dos o tres nada más). También mando a una carpeta específica todas las notificaciones de redes sociales y similares. Las miro una vez a la semana, todo lo más. En tercer lugar, intento aplicar etiquetas automáticamente a mails de los cuales sé su temática por la persona que los envía o alguna otra palabra clave. Esto me permite archivarlos rápidamente después de leerlos pero aún así tenerlos siempre a mano. Por último, tengo unas cuantas etiquetas para mails sobre los que tengo que hacer algo antes de archivarlos (prioridad, revisar, hacer, responder, peticiones).

(más…)